Situada en el monte Rokko, con unas vistas espectaculares sobre Kobe, la “House in Rokko” del arquitecto japonés Yo Shimada explora cómo la arquitectura puede minimizar el impacto físico sobre el entorno manteniendo, al mismo tiempo, las vistas.
Casa Rokko Ficha Técnica
- Arquitecto: Tato Architects
- Ubicación: Kobe, prefectura de Hyogo, Japón
- Año del proyecto: 2011
- Superficie: 94,5 m²
- Fotografías: © Kenichi Suzuki
Me he sentido algo inquieto respecto a cómo debe ser la arquitectura en un lugar con grandes vistas. […] ¿Cuál es la forma de disfrutar del paisaje sin imponerse al entorno?
– Yo Shimada
Arquitectura y Paisaje: Una Relación de Equilibrio
La obra de Tato Architects plantea una reflexión sobre la relación entre arquitectura y paisaje, particularmente en contextos donde la vista se convierte en protagonista. El proyecto, situado en las laderas del monte Rokko, parte de una inquietud esencial: ¿cómo construir en un entorno de gran belleza sin alterar su equilibrio visual y emocional? La respuesta se traduce en una arquitectura que observa sin dominar, que se abre al paisaje sin imponerse a él.
Lejos de recurrir a gestos monumentales, el diseño se centra en la experiencia del habitar como mediación entre el individuo y su entorno. La casa se convierte en un instrumento de observación, un marco transparente desde el que contemplar el paisaje y, al mismo tiempo, reconocer los límites de la intervención humana.
Estrategia de Implantación: Adaptación a la Pendiente
El emplazamiento, al final de una zona residencial de media ladera, impuso restricciones técnicas significativas. La imposibilidad de introducir maquinaria pesada llevó a concebir un sistema constructivo manual, delimitando una superficie útil de apenas 3,5 por 13,5 metros. Este condicionante se transformó en oportunidad: la arquitectura se hizo ligera, precisa y rigurosamente adaptada a su topografía.
La primera planta se abre completamente al exterior mediante cerramientos de vidrio, articulando un espacio flexible que integra cocina, comedor y sala de estar. Concebida como una extensión del paisaje, esta planta sirve tanto para la vida diaria como para actividades más ocasionales: reuniones, música o mantenimiento de bicicletas, convirtiendo el interior en un ámbito permeable y cambiante.
Al final del área residencial desarrollada a media ladera del monte Rokko, el terreno era amplio, pero demasiado empinado para introducir maquinaria pesada para hincar pilotes. Una superficie de 3,5 m por 13,5 m quedó disponible una vez asegurada la distancia necesaria para la excavación manual de los cimientos, respecto al antiguo muro de contención y la tierra acumulada.
Materialidad, Técnica y Confort Ambiental
La segunda planta concentra las áreas privadas: dormitorio, almacenamiento y dependencias húmedas bajo una cubierta de apariencia doméstica que dialoga con las casas vecinas. Las aberturas uniformes favorecen la ventilación cruzada, mientras que los sistemas de climatización pasiva y activa, almacenamiento térmico nocturno en el forjado y calefacción radiante por infrarrojos, garantizan confort con un bajo consumo energético.
La elección de una estructura metálica responde tanto al deseo del cliente como a la lógica constructiva del lugar. Cada elemento, de acero laminado en H de 100 x 100 mm, se diseñó para ser manipulado a mano, limitando su peso a 100 kg. Una plancha de acero de 4,5 mm en el perímetro del balcón compensa la pérdida de rigidez provocada por el vacío central de la escalera.
El resultado es una arquitectura sobria, de materialidad honesta y precisión estructural, donde el paisaje y la vida cotidiana se integran en una continuidad visual y espacial. Los suelos de mortero visto, los techos altos y los muros de vidrio definen una atmósfera serena y atemporal. La casa no busca destacar, sino coexistir: un ejercicio de contención y sensibilidad que reafirma la postura de Tato Architects frente al territorio contemporáneo.
- Arquitecto principal: Yo Shimada











